¿Viajas con tu mascota? 15 claves esenciales para unas vacaciones familiares sin sorpresas

Viajar en familia con una mascota puede ser una experiencia maravillosa, pero solo si se planifica adecuadamente. No se trata solo de llevar al perro o al gato en el coche, sino de garantizar su bienestar, seguridad y salud durante todo el trayecto. Según un estudio del Instituto Nacional de Estadística (INE) en colaboración con asociaciones veterinarias mexicanas, más del 30 % de los dueños que han viajado con sus mascotas reportaron inconvenientes por falta de preparación o desconocimiento de las normas.

1. Verifica el registro y vacunas actualizadas

En México, todos los perros y gatos deben estar registrados con microchip para poder ser localizados en caso de extravío. Además, las vacunas básicas como la antirrábica y la polivalente deben estar vigentes. Muchos hoteles pet-friendly o aerolíneas pueden pedir el certificado de vacunación como requisito obligatorio. Lleva una copia física y digital del historial veterinario de tu mascota.

2. Transportadora adecuada para cada tipo de viaje

Para viajes en auto, autobús o avión, es indispensable contar con una jaula o mochila de transporte segura y ventilada. En caso de trayectos largos, lo ideal es usar transportadoras que puedan sujetarse con el cinturón de seguridad. Introducir una manta con su olor o un juguete familiar puede disminuir el estrés de tu mascota.

3. Lista de artículos indispensables para la mascota

  • Alimento y premios (llevar más de lo necesario por precaución)
  • Bebedero y comedero portátil (preferiblemente plegables)
  • Bolsas para heces y tapetes absorbentes
  • Cobija o cama habitual
  • Correa, arnés y placa con datos actualizados

No olvides incluir repelente para insectos apto para animales, cepillo, toallas húmedas, medicamentos en uso y un pequeño botiquín veterinario. Si tu mascota sigue una dieta especial, asegúrate de empacar suficiente para todo el viaje.

4. Reserva alojamientos verdaderamente pet-friendly

Antes de confirmar tu reserva, asegúrate de que el alojamiento acepta mascotas sin restricciones de peso, raza o número. Consulta si existe un cargo adicional (en México suele rondar entre 100 y 300 pesos por noche), y si ofrecen servicios adicionales como camas, platos o áreas verdes. Plataformas como Booking, Airbnb o PetsyTravel incluyen filtros para mascotas.

5. Conoce las normas del transporte público y privado

En vuelos nacionales, muchas aerolíneas mexicanas permiten animales en cabina si pesan menos de 9 kg con transportadora, pagando una tarifa entre 800 y 1,200 pesos. En autobuses ADO o ETN, se aceptan mascotas pequeñas en jaulas bajo supervisión. En auto particular, es recomendable que el animal viaje asegurado y no suelto para evitar distracciones o accidentes.

6. Prevención contra pulgas, garrapatas y mosquitos

En regiones cálidas como la Riviera Maya o Chiapas, es indispensable aplicar antiparasitarios antes del viaje. Las enfermedades transmitidas por insectos como la erliquiosis o la filariosis pueden afectar gravemente a tu mascota. Consulta con tu veterinario el producto más adecuado (collar, pipeta o comprimido).

7. Higiene y control de necesidades durante el viaje

Las nuevas rutinas pueden alterar el comportamiento de tu mascota. Haz paradas frecuentes para que orine y camine. Lleva toallas o tapetes si necesitas proteger superficies en hoteles o casas rentadas. Siempre recoge los desechos y respeta las reglas locales de higiene, especialmente en espacios públicos o playas.

8. Botiquín de primeros auxilios y veterinarios de urgencia

  • Medicamentos básicos: antiinflamatorios, antidiarreicos, solución salina
  • Vendas, gasas, tijeras, termómetro digital
  • Limpiadores oculares y de oído

Antes del viaje, localiza clínicas veterinarias abiertas 24 h en tu destino. Apps como PetSOS, VetFinderMX o incluso Google Maps permiten identificar servicios cercanos en caso de emergencia.

9. Cuida la temperatura y las condiciones del entorno

En verano, jamás dejes a tu mascota en el coche. La temperatura puede subir a más de 50 °C en minutos. Usa ventanas abiertas, bebedero disponible, toalla húmeda o tapete refrescante. En invierno, en zonas como el Altiplano o la Sierra Tarahumara, puedes necesitar ropa térmica, botitas o una manta adicional.

10. Detecta signos de estrés y actúa a tiempo

Ladridos excesivos, jadeo o inactividad pueden indicar estrés. Mantén una rutina diaria en la medida de lo posible. Dedica momentos de descanso y calma. Si viajas con niños, explícales la importancia de respetar el espacio del animal para evitar sobrecarga emocional.

11. Apps útiles para viajes con mascotas

Usa aplicaciones como DogHero (cuidadores), WoofTogether o Rappi Mascotas para buscar hospedaje, restaurantes pet-friendly y tiendas especializadas. También puedes apoyarte en grupos de Facebook como “Viajes con Perros México” para conocer experiencias reales y recomendaciones.

12. Paradas frecuentes si viajas en carretera

Haz una pausa cada 2 horas para que tu mascota se hidrate, camine y haga sus necesidades. Algunas gasolineras o tiendas OXXO tienen pequeños jardines donde puede caminar. Nunca dejes al animal solo dentro del vehículo, ni siquiera con las ventanas abiertas.

13. Revisión post-viaje y salud general

Al regresar, observa si hay cambios en el apetito, el ánimo o el comportamiento. Si notas diarrea, vómito o letargo persistente, consulta al veterinario. Revisa también las patas, orejas y pelaje para descartar espinas, pulgas o garrapatas.

14. Reparto de responsabilidades familiares

Define quién se encargará de alimentar, pasear y cuidar a la mascota durante el viaje. Repartir las tareas reduce el estrés y evita descuidos. Si tienes más de una mascota, considera llevar fichas individuales con sus necesidades específicas.

15. Regresar a la rutina habitual

Después de unas vacaciones, es importante restablecer la rutina de horarios para comidas, paseos y descanso. Lava todos los objetos usados durante el viaje y asegúrate de ofrecer un ambiente tranquilo y predecible. Esto facilitará la readaptación del animal.

Nota: Este contenido tiene fines informativos. Para diagnósticos y tratamientos específicos, acude a tu médico veterinario de confianza.