Transforma a tu perro en 7 días: Comandos básicos y técnicas de corrección de conducta

Una relación armoniosa con tu perro comienza con un entrenamiento adecuado. Tu perro no es solo una mascota, sino un miembro de la familia. Aplicar comandos básicos de forma consistente y estrategias de corrección de conducta comprobadas fortalece la confianza y facilita la convivencia diaria. Ya vivas en un piso en Madrid o en una casa en las afueras de Barcelona, este guía paso a paso te enseñará a entrenar los comandos “sentado”, “quieto” y “ven”, implementar un sistema de recompensas con refuerzo positivo, ignorar conductas indeseadas y evitar errores comunes.

Por qué el entrenamiento consistente es crucial

Construcción de confianza y comunicación clara

Entrenar a tu perro no solo implica aprender órdenes, sino enseñarle qué esperas de él. Señales verbales y lenguaje corporal uniformes reducen el estrés y la incertidumbre. Evita castigos severos que socaven la confianza. Recompensa de inmediato las conductas correctas para reforzar asociaciones positivas. Elige un lugar tranquilo, ya sea tu salón en Sevilla o un rincón sereno del Parque Güell en Barcelona, para tus sesiones.

Comando básico 1: Sentado

Método paso a paso

  1. Prepara una recompensa: utiliza bocados pequeños y suaves.
  2. Guía con la recompensa: sitúa el bocado frente al hocico del perro y muévelo lentamente hacia arriba y atrás, provocando que el perro se siente.
  3. Orden y refuerzo: pronuncia “sentado” de forma clara en el momento en que se siente, luego entrega la recompensa y elogia inmediatamente.
  4. Sesiones cortas: máximo 5 minutos, 2–3 veces al día.
  5. Progresión: reduce gradualmente las golosinas y sustituye por elogios verbales y caricias.

Comando básico 2: Quieto

Crear un entorno controlado

Empieza en un espacio con pocas distracciones, como tu salón o un patio tranquilo en Valencia.

  1. Posición inicial: haz que tu perro se siente.
  2. Da la orden: di “quieto” con voz calmada y muestra la palma de la mano.
  3. Aumenta distancia y duración: comienza a 1 metro y 5 segundos, y ve alargando progresivamente.
  4. Recompensa: regresa junto al perro para elogiarlo—no utilices el comando “ven” para premiar este ejercicio.

Comando básico 3: Ven

Perfeccionar el llamado

Un buen llamado puede salvar vidas, especialmente cerca de carreteras.

  1. Entorno seguro: comienza en un área cercada, como una residencia con patio en Málaga o un recinto de adiestramiento en Valencia.
  2. Nombre + orden: llama a tu perro por su nombre seguido de “ven”, con tono amistoso.
  3. Lenguaje corporal: acerca tu mano hacia ti para invitarle.
  4. Refuerzo al llegar: ofrece una golosina de alto valor y felicitaciones entusiastas.

Sistema de recompensas y refuerzo positivo

Estrategia equilibrada de premios

Combina golosinas, elogios verbales y caricias con moderación. Ajusta la cantidad de golosinas al peso de tu perro y redúcelas gradualmente. Pasa luego a recompensas intermitentes (una golosina cada 3 o 4 respuestas correctas) para mantener el comportamiento en el largo plazo. Este método reduce el estrés y fortalece el vínculo afectivo.

Corrección de conducta: Ignorar y consistencia

Eliminar conductas no deseadas

Para disminuir ladridos excesivos o saltos, utiliza la técnica de ignorar: desvía la mirada y mantén la calma hasta que termine la conducta. Elogia y atiende a tu perro en cuanto se calme. Todos los miembros de la familia deben aplicar la misma estrategia para evitar confusiones.

Errores comunes y soluciones efectivas

Evitar elogios excesivos y señales contradictorias

Un exceso de elogios por pequeños logros puede diluir la importancia de la orden. Utiliza señales claras y consistentes. Si el perro falla, detén la sesión brevemente, relájate y luego retómala con calma.

Mantenimiento del progreso y consejos avanzados

Claves para el éxito a largo plazo

Incorpora el entrenamiento en la rutina diaria: practica comandos durante paseos por el Parque del Retiro en Madrid o antes de entrar en una cafetería en Valencia. Lleva un registro de las sesiones para observar el progreso. Adapta las sesiones según la temporada: en verano, busca zonas sombreadas; en invierno, utiliza juegos de estimulación mental en interiores. Participa en talleres de adiestramiento en Barcelona o eventos caninos en Sevilla para mejorar la socialización de tu perro. De esta manera, no solo reforzarás la obediencia, sino también el vínculo con tu compañero canino.