Cuando la rutina diaria se vuelve pesada: entender y afrontar los bajones profesionales
En México, según datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), más del 60 % de los trabajadores han experimentado alguna vez falta de motivación o fatiga emocional. Entre jornadas laborales largas, exceso de reuniones virtuales y una cultura de alta disponibilidad, no es extraño que muchos empleados atraviesen un periodo de estancamiento o agotamiento.
Este artículo presenta 10 estrategias prácticas, contextualizadas al entorno laboral mexicano, pensadas para ayudarte a recuperar la energía y el sentido de tu trabajo. No se trata de frases motivacionales, sino de acciones reales que puedes implementar desde hoy mismo, estés en una oficina, en casa o incluso si trabajas por tu cuenta.
1. Reconocer el bajón emocional sin sentir culpa
En una cultura laboral como la mexicana, donde se valora la entrega total, aceptar un estado de agotamiento puede sentirse como un fracaso. Sin embargo, reconocer que estás en una etapa de baja energía no significa debilidad, sino madurez emocional.
Darte permiso para decir “no estoy en mi mejor momento” abre la puerta al cambio. Esta aceptación te permite pasar del estado de resistencia al de reconstrucción emocional consciente.
2. Romper con la rutina laboral para salir del piloto automático
Muchas personas inician su jornada revisando el correo, atendiendo mensajes por WhatsApp o Slack y terminan apagando fuegos todo el día. Este tipo de rutina desgasta sin ofrecer sensación de avance. Introducir pequeños cambios genera una diferencia tangible:
- Empieza tu día con una tarea creativa o gratificante antes de revisar mensajes
- Reorganiza tu espacio: cambia la ubicación de tu escritorio o mejora la iluminación
- Haz una caminata de 10 minutos antes de sentarte a trabajar
Estas acciones simples reactivan el sistema atencional y renuevan el compromiso con tu entorno laboral.
3. Establecer horarios de desconexión digital
La hiperconectividad es uno de los factores más estresantes para los profesionistas mexicanos, especialmente tras la pandemia. Estar siempre disponible a través de mensajes, correos y notificaciones satura la mente y agota el sistema nervioso.
- Define una hora diaria libre de pantallas (modo avión o apps como Forest o Flipd)
- No respondas mensajes laborales después de las 7 p.m. si no es urgente
- Dedica al menos 30 minutos al día a una actividad sin dispositivos: leer, cocinar, hacer jardinería
Esto ayuda a recuperar el enfoque voluntario y disminuir la fatiga mental.
4. Establecer metas pequeñas para recuperar el sentido de logro
Los grandes proyectos pueden parecer inabarcables en momentos de baja motivación. Por eso, aplicar la técnica de microobjetivos es tan útil: divide tu jornada en acciones concretas y rápidas.
Por ejemplo: “escribir el primer párrafo del informe”, “contestar solo tres correos clave”, “organizar el escritorio”. Cada objetivo alcanzado activa el sistema de recompensa cerebral y genera impulso natural hacia el siguiente paso.
5. Revisar tu estado físico: sueño, alimentación y movimiento
Según la Secretaría de Salud, más del 40 % de los adultos mexicanos duerme menos de 6 horas por noche, lo cual impacta negativamente la energía, el humor y la concentración.
- Incluye alimentos con triptófano: plátanos, aguacate, almendras
- Evita comer frente a pantallas; realiza pausas activas cada 90 minutos
- Camina al menos 15 minutos diarios; si es posible, al aire libre
Una buena higiene del sueño y una alimentación equilibrada son base esencial para la motivación sostenida.
6. Reconectar con el propósito de tu trabajo
Cuando el trabajo se vuelve monótono, perdemos de vista el “por qué” que lo sustenta. ¿Qué impacto tiene tu labor en otras personas? ¿Qué te inspiró a elegir este camino profesional?
Revisar el propósito personal vinculado a tu empleo reactiva la motivación intrínseca. Puede ser brindar apoyo, crear soluciones, generar bienestar económico, entre otros.
7. Inspirarte en experiencias de otras personas
Escuchar testimonios reales puede ser más útil que leer consejos abstractos. En México, hay podcasts como “Cracks”, “Dementes” o “Así Como Suena” donde se relatan historias de profesionales que superaron crisis laborales.
Este tipo de relatos generan identificación y ofrecen referencias concretas de resiliencia profesional.
8. Tomar días libres estratégicamente para un corte mental
Aunque la ley mexicana establece un mínimo de 12 días hábiles de vacaciones pagadas desde el primer año, muchos trabajadores no los aprovechan. Tomarte un día libre fuera de lo habitual puede ser terapéutico.
Un paseo a un pueblo mágico cercano, una tarde sin celular ni responsabilidades, o incluso una mañana en silencio en casa puede ayudarte a renovar tu perspectiva emocional y laboral.
9. Invertir en tu desarrollo profesional a largo plazo
Estancarse profesionalmente puede generar sensación de vacío. Es un buen momento para:
- Actualizar tu perfil de LinkedIn y tu CV
- Inscribirte a un curso en plataformas como Crehana, Domestika o edX
- Contactar a una red de mentores o excolegas para evaluar nuevas oportunidades
Tomar control de tu trayectoria profesional restaura la sensación de agencia y dirección personal.
10. Moverte antes de “sentir las ganas”: la acción genera motivación
La idea de que primero hay que sentirse inspirado para actuar es errónea. En realidad, la acción precede a la motivación. Hacer aunque no tengas ganas es lo que reactiva el motor interno.
Ejemplo: empieza con una tarea mínima — como escribir una idea en una libreta o ordenar tu escritorio — y verás cómo el movimiento físico genera impulso psicológico.
Un bajón emocional no es un fracaso, es una señal de transformación
Los bajones laborales no son el final del camino, sino un aviso de que algo necesita ajustarse. La clave está en no quedarse paralizado y tomar decisiones intencionadas, paso a paso.
Estas 10 estrategias no requieren cambios drásticos ni fórmulas mágicas. Son accesibles, efectivas y diseñadas para ayudarte a reconectar con tu valor y tu energía profesional.
Este contenido tiene fines informativos sobre bienestar psicológico y desarrollo profesional. Ante síntomas persistentes o angustia emocional, consulta a un profesional de la salud o terapeuta certificado.